Síntomas de H pylori en los gatos
El descubrimiento de la asociación de Helicobacter pylori con la gastritis, las úlceras pépticas y la neoplasia gástrica ha provocado cambios fundamentales en la comprensión de la enfermedad gástrica en los seres humanos. La investigación de la relación de la enfermedad gástrica con Helicobacter spp. en otros animales ha dado como resultado el descubrimiento de H. mustelae en hurones con gastritis y úlceras pépticas, H. acinonychis en guepardos con gastritis grave y H. Heilmannii en cerdos con úlceras gástricas. La presencia de organismos gástricos similares a Helicobacter (HLO) en los estómagos de perros y gatos se conoce desde hace muchos años, pero la relación de estos organismos con la enfermedad gástrica sigue siendo controvertida.
Las Helicobacter son bacterias gramnegativas con forma de espiral o curva, o a veces cocos, que habitan en las glándulas, las células parietales y la mucosa del estómago. Las grandes HLO gástricas son morfológicamente indistinguibles por microscopía óptica, en la que se ven como grandes espirales de 5-12µ de longitud. Se han clasificado en varias Helicobacter spp. sobre la base de la secuenciación del ARNr 16s, la hibridación del ADN y la apariencia al microscopio electrónico. Se han detectado H. felis, “H. heilmannii”, H. bizzozeronii y H. pametensis en la mucosa gástrica de gatos domésticos. H. pylori se ha aislado de los estómagos de un grupo de gatos alojados en colonias, pero no de gatos de compañía. H. bizzozeronii, H. heilmannii, H. felii, H. salomonis, F. rappini y H. bilis se han identificado en perros.
¿Pueden los humanos contagiarse del h. pylori de los perros?
ResumenAntecedentesLa presencia de Helicobacter en la mucosa gástrica es responsable de producir patología en muchas especies animales, incluido el hombre. Desde que se demostró que el ser humano alberga muchas de las mismas especies bacterianas que los carnívoros domésticos, la preocupación por su potencial zoonótico ha ido en aumento. El Helicobacter pylori, un carcinógeno de clase 1 responsable de casos de gastritis y cáncer gástrico en el ser humano, produce una patología similar en los carnívoros domésticos y se considera un ejemplo de antroponosis. El caso que aquí se presenta se refiere a una gata castrada de raza mixta de 13 años de edad que fue examinada en la necropsia.HallazgosSe analizaron muestras de estómago para detectar la presencia de Helicobacter spp. mediante citología, histopatología y PCR. Se observó una leve atrofia de la mucosa en el fondo y el antro, mientras que se observaron infiltrados linfoplasmocíticos en la lámina propia del antro. Se observaron organismos similares a Helicobacter en el corpus y el antro, ocupando las glándulas gástricas y la mucosa superficial. Fue posible detectar Helicobacter spp., H. pylori, H. heilmannii y H. bizzozeronii en el fondo, el corpus y el antro mediante PCR, mientras que en el antro las muestras de PCR fueron positivas para H. pylori.ConclusionesLa hembra castrada objeto de estudio podría representar una población aún no descrita de gatos domésticos infectados por H. pylori o un caso de antroponosis.
H pylori de los gatos a los humanos
TopCausas de la infección estomacal por Helicobacter en los gatosNo está claro cómo se transmite la bacteria Helicobacter entre los gatos, sin embargo, muchos expertos veterinarios creen que puede transmitirse cuando un gato consume materia fecal de un animal infectado. Tampoco está claro si la bacteria puede transmitirse entre humanos y gatos, aunque muchos creen que es posible. Una vez que la bacteria se transmite, viajará a través del sistema gastrointestinal y comenzará a excavar a través del revestimiento del estómago, causando malestar y otros síntomas diversos.TopDiagnóstico de la infección estomacal por Helicobacter en los gatosEs muy difícil diagnosticar una infección estomacal causada por la bacteria Helicobacter, por lo que los veterinarios a menudo se ven obligados a hacer un diagnóstico después de eliminar todas las demás causas posibles. Asegúrese de hablar con el veterinario sobre los síntomas que ha observado y si ha realizado algún cambio importante en la dieta del gato.
El veterinario puede empezar realizando pruebas básicas, como un hemograma completo, un análisis de orina y un perfil bioquímico. Esto ayudará al veterinario a hacerse una idea más clara del estado de salud general del gato, y debería mostrar un nivel elevado de glóbulos blancos, lo que indica una infección.
Síntomas del Helicobacter pylori
Aunque la mayoría de las enfermedades infecciosas felinas sólo afectan a los gatos, algunas de estas enfermedades pueden transmitirse de los gatos a las personas. Las enfermedades que pueden transmitirse de los animales a las personas se denominan enfermedades zoonóticas. Aunque no es exhaustivo, este artículo destaca las enfermedades zoonóticas más comunes que pueden transmitir los gatos y las sencillas precauciones que puede tomar para reducir el riesgo de contraer estas enfermedades. Para obtener más información sobre los riesgos específicos, el diagnóstico y el tratamiento de las enfermedades zoonóticas, póngase en contacto con su médico o profesional de la salud.
La probabilidad de que una persona normal contraiga una enfermedad zoonótica de un gato es baja, pero los individuos con sistemas inmunitarios inmaduros o debilitados son más susceptibles a estas enfermedades. Esto incluye a los bebés, las personas con síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), los ancianos y las personas que reciben quimioterapia contra el cáncer u otros fármacos que pueden suprimir su sistema inmunitario.
La enfermedad por arañazo de gato (EAG) está causada por una bacteria llamada Bartonella henselae, que puede estar presente en la saliva de los gatos infectados y en el cuerpo de las pulgas de los gatos. Como su nombre indica, esta infección bacteriana suele transmitirse del gato al ser humano a través de los arañazos, aunque también puede transmitirse a través de las heridas por mordedura y cuando un gato lame las heridas abiertas de una persona. Entre los gatos, esta bacteria se transmite más comúnmente por las picaduras de pulgas de gato infectadas, y también puede encontrarse en las heces de estas pulgas, que pueden servir como fuentes de infección si se exponen a una herida abierta en un gato o en un humano.