
Burro de Shrek
El Maestro Gato, o el Gato con Botas, es un cuento de Charles Perrault y fue publicado en 1697. Charles era miembro de la Academia Francesa. Gracias a su participación como intelectual en esta organización, fue capaz de producir una obra llamada Paralelos entre los Antiguos. Esta obra contribuyó a la era de la Ilustración en Europa y permitió que ésta se abriera a los cuentos. Perrault publicó piezas muy conocidas en un libro titulado Historias o cuentos de tiempos pasados, con moraleja: Cuentos de Mamá Ganso. Sin embargo, publicó el libro con el nombre de su hijo, Pierre 1. Aunque la versión del Gato con Botas más conocida hoy en día fue escrita por Perrault, la historia original del Gato con Botas era una fábula escrita por Giovanni Straparola 2. La versión de Perrault es muy similar a la original en el sentido de que sigue intentando ayudar al hijo menor. Sin embargo, esta versión es la primera que presenta las botas y un ogro. Además, la versión de Perrault hace que el gato sea un personaje muy astuto y furtivo, lo cual es un tema común para muchas otras historias como, por ejemplo, Las bodas de Jogeshwar3.
Prinzessin fiona
Son muchos los gatos animados que forman parte de los recuerdos de nuestra infancia, pero si hay uno al que se le tiene especial cariño es sin duda El gato con botas. Un simpático y muy astuto gato naranja capaz de conseguir lo que quiere gracias a la seguridad que le proporcionan unas simples botas.
El origen de este enigmático peludo se remonta al año 1500, cuando el europeo Giovanni Francesco Straparola recogió la historia en su novela Las noches de Niza. Más tarde, en 1634, Giambattista Basile lo relató en su libro titulado Cagliuso, y finalmente en 1697 Charles Perrault le dio una nueva vida en su libro Cuentos de la Oca.
El Gato con Botas fue la herencia que un molinero dejó a su hijo, llamado Benjamín. Para no pasar hambre, lo primero que pensó fue en comérselo, pero resultó que este animalito era toda una caja de sorpresas, sí, sorpresas que sólo se revelarían si Benjamín le daba unas botas para que pudiera caminar por el campo sin lastimarse las patas. El astuto animal le prometió además que su herencia no sería tan pobre como él pensaba.
La muerte de Humpty Dumpty
El “Gato con Botas”, ejemplo clásico del cuento de hadas con “el animal como ayudante”, entró en el canon de los cuentos clásicos cuando Charles Perrault lo incluyó (como “Le Chat Botté”) en su colección de cuentos de 1697, aunque, como muchos de los mejores cuentos de hadas, se puede encontrar una versión anterior en el Pentamerone de 1634, una colección de cuentos populares orales recopilados por Giambattista Basile.
A lo largo de los años, el análisis del “Gato con Botas” ha preocupado a autores, comentaristas e ilustradores. George Cruikshank se opuso a que “un sistema de impostura fuera recompensado con las mayores ventajas mundanas”.
El hijo menor pensó que había sacado la paja más corta con el gato, pero éste le prometió que si el hijo le hacía unas botas, demostraría ser una mascota digna y útil. Una vez que el gato tuvo unas botas y una pequeña bolsa que podía usar, se fue a cazar conejos. Tras cazar un conejo, el Gato con Botas se lo llevó al Rey, diciéndole que era un regalo del Señor Marqués de Carabás, el amo del gato.
Carácter del título
“El Gato con Botas” (en italiano: Il gatto con gli stivali) es un cuento de hadas italiano[1][2], que posteriormente se extendió por el resto de Europa, sobre un gato antropomórfico que se sirve de artimañas y engaños para conseguir poder, riqueza y la mano de una princesa en matrimonio para su amo, sin dinero y de baja cuna.
El relato más antiguo es el del autor italiano Giovanni Francesco Straparola, que lo incluyó en sus Noches caricaturescas de Straparola (c. 1550-1553) en XIV-XV. Otra versión fue publicada en 1634 por Giambattista Basile con el título de Cagliuso, y un cuento fue escrito en francés a finales del siglo XVII por Charles Perrault (1628-1703), funcionario retirado y miembro de la Académie française. Existe una versión escrita por Girolamo Morlini, de quien Straparola utilizó varios cuentos en Las noches facciosas de Straparola[3]. El cuento apareció en un manuscrito ilustrado dos años antes de su publicación en 1697 por Barbin en una colección de ocho cuentos de hadas de Perrault llamada Histoires ou contes du temps passé[4][5] El libro tuvo un éxito inmediato y sigue siendo popular[3].