Vacunas para gatos
Mantener a su gato a salvo requiere mucho más que ponerle un collar. Los gatos son criaturas curiosas que siempre hacen travesuras. Por eso los amamos, claro, pero también significa que pueden poner en peligro su propia seguridad en el curso de un juego inocente.
Lectura de 3 minutosAquí hay ocho cosas que debe mantener alejadas de su gato para reducir la posibilidad de que se haga daño, o algo peor. Si su gato ingiere una sustancia peligrosa, llame inmediatamente a la línea de ayuda contra el envenenamiento de mascotas al 1-800-213-6680. (Y para las cosas que debe mantener alejadas de los perros, asegúrese de consultar nuestro artículo 20 cosas que nunca debe dar de comer a su perro).
Los anticongelantes y los desoxidantes contienen un ingrediente llamado etilenglicol, que tiene un olor dulce que a veces resulta tentador para los gatos. Si lo ingieren pueden envenenarse, así que guarde estos productos donde su gato no pueda acceder a ellos, y asegúrese de que su coche no pierde anticongelante que pueda encharcarse en su entrada o garaje.
Nunca hemos conocido a un gato al que no le guste abalanzarse sobre la cinta. Si la cinta es uno de los juguetes favoritos de su gato, asegúrese de supervisarlo mientras juega con ella. El resto del tiempo, manténgalo fuera del alcance de su gato. Un trozo de cinta, hilo, cuerda, oropel o incluso hilo dental que se trague puede enroscarse en los intestinos de su gato y provocar una obstrucción o incluso cortarlos. Si sospecha que su gato se ha tragado un artículo de este tipo, llévelo inmediatamente al veterinario para que le haga una radiografía.
Cat. alta
Los resultados son asombrosos. Por término medio, cada gato doméstico errante mata 186 reptiles, aves y mamíferos al año, la mayoría de ellos nativos de Australia. En conjunto, eso supone entre 4.440 y 8.100 animales por kilómetro cuadrado al año en la zona habitada por los gatos domésticos.
Si tiene un gato y quiere proteger la vida salvaje, debería mantenerlo dentro de casa. En Australia, 1,1 millones de gatos domésticos están contenidos las 24 horas del día por propietarios responsables. Los 2,7 millones de gatos domésticos restantes -el 71% de todos los gatos domésticos- pueden vagar y cazar.
Es más, su gato doméstico podría estar saliendo sin que usted lo sepa. Un estudio de rastreo por radio en Adelaida descubrió que de los 177 gatos que los propietarios creían que estaban dentro de casa por la noche, 69 gatos (el 39%) se escapaban para vivir aventuras nocturnas.
Pero los estudios que utilizaron collares de seguimiento por vídeo de gatos o análisis de excrementos (comprobación de lo que hay en la caca del gato) han establecido que muchos gatos domésticos matan animales sin llevarlos a casa. Por término medio, los gatos domésticos sólo se llevan a casa el 15% de sus presas.
Esta enorme cifra puede llevar a algunos propietarios de mascotas a pensar que la contribución de su propio gato no supondría una gran diferencia. Sin embargo, hemos comprobado que incluso los gatos domésticos solos han provocado el declive y la pérdida total de las poblaciones de algunas especies animales autóctonas de su zona.
Un gato mata a un gatito
Don’t F**k with Cats: Hunting an Internet Killer es una docuserie de crímenes reales de 2019 sobre una cacería humana en línea.[1] Está escrita y dirigida por Mark Lewis[2] y se estrenó en Netflix el 18 de diciembre de 2019.[1][3] La serie narra los eventos que siguen a una investigación amateur de origen colectivo sobre una serie de actos de crueldad animal cometidos por el actor pornográfico canadiense Luka Magnotta, que culminan en su asesinato del estudiante internacional chino Jun Lin. Fue uno de los 5 documentales más vistos de Netflix en 2019[4].
La docuserie de tres partes sigue a un grupo de detectives aficionados de Internet que lanzaron una persecución de Luka Magnotta después de que éste ganara notoriedad internacional en 2010 por compartir un vídeo gráfico en línea en el que mataba a dos gatitos con una aspiradora.[1][5] Magnotta fue posteriormente condenado por asesinar al estudiante internacional chino Jun Lin en circunstancias espeluznantes en 2012.[6][7]
Dos semanas después de su estreno, la docuserie se convirtió en uno de los 5 documentales más vistos de Netflix en 2019[4] En el sitio web agregador de críticas Rotten Tomatoes, la serie tiene un 67% de aprobación, basado en 12 críticas, con una calificación media de 8/10. El consenso del sitio web dice: “Don’t F**k With Cats ofrece una historia intrigante, pero la intención cuestionable y la narración confusa hacen que sea difícil de vender para cualquiera que no sea un completo del crimen verdadero”[8].
Envenenamiento de gatos
Tradicionalmente, los ecologistas han estudiado las relaciones entre la gravedad de los impactos de las especies invasoras y la estructura taxonómica de las comunidades animales (por ejemplo, Sanders et al., 2003; Hejda et al., 2009). Los recientes avances en la aplicación de marcos basados en los rasgos de las especies han proporcionado un enfoque alternativo que permite a los investigadores cuantificar las respuestas a las perturbaciones en todos los taxones y ecosistemas (Oliver et al., 2015). La cuantificación de los impactos de las especies invasoras en la estructura funcional de las comunidades es importante para dilucidar el mecanismo que subyace a los procesos de invasión, así como para mejorar la capacidad de los investigadores de predecir los impactos de las especies invasoras en el funcionamiento de los ecosistemas (Tilman et al., 1997).
En este trabajo, realizamos un estudio de ciencia ciudadana para evaluar el impacto de la depredación de los gatos domésticos en la estructura funcional de las comunidades de vertebrados en Italia mediante un enfoque basado en los rasgos. En concreto, los objetivos de este estudio eran (i) cuantificar la presión depredadora de los gatos domésticos sobre las presas vertebradas en relación con las características del paisaje, y (ii) evaluar el efecto de la depredación de los gatos en la estructura funcional de las comunidades de vertebrados. Sugerimos que el mayor número de especies matadas por gatos en libertad se produciría en las zonas rurales y en las regiones del sur, donde se sabe que se da la mayor riqueza de especies (Blasi et al., 2014; Genovesi et al., 2014). Además, también predijimos que, dados los resultados de estudios anteriores, los gatos con un cascabel en el collar (Calver et al., 2007; Gordon et al., 2010) matarían menos individuos y especies que los que no tienen cascabeles.